De nuevo un miembro de la familia Serrulle en Santiago es torpedeado para evitar que alcance el control municipal, por parte de la dirigencia peledeista y parecería que en el seno de esta organización hay un grupo dispuesto a sacarse los dos ojos, con tal de ver a sus adversarios tuertos. La primera victima fue el ingeniero, Rafael Serrulle, cuando buscaba esa misma posición y ahora Gilberto Serrulle, quien a pesar de dominar las encuestas, se impuso el capricho del Comité Politico, cerrando el paso a tan prominente ciudadano. Por esas mismas luchas rastreras, Julián Serrulle, abandonó las riendas del partido morado en esta ciudad.
Como clara señal, de que la decencia, el decoro y el pudor no caben en estas organizaciones y que por el contrario, allí prevalece lo anti valor, la dedocracia, aunque la misma los conduzca al fracaso total. Cuando vimos que este reputado medico decidió optar por la sindicatura, nos llenó de satisfacción, al pensar que por primera vez en las últimas décadas, Santiago tendría un verdadero alcalde preocupado por la municipalidad. Pensamos que por fin, llegaría el orden, la honradez y decencia a administrar el Ayuntamiento y sus recursos, pero en el grupo del presidente Fernández hay algunos, que no quieren ver a la familia Serrulle ni en sopa y a lo mejor tengan muchas razones, pues mansos y cimarrones no pueden mezclarse.
Esta familia ha dado muestra de servir y no servirse de los cargos, lo que puede chocar con los intereses de esos sectores. Los santiagueros conocen muy bien de su entrega a las mejores causas y la forma desinteresada conque trabajan en favor de los pobres, sin demagogia ni politiquería.
A Julián Serrulle, lo recordamos defendiendo obreros de Zonas Francas, evitando sean engañados por patrones inescrupulosos. Del doctor, Gilberto Serrulle, podemos atestiguar mucho mas, pues en mi labor de reportero en esta ciudad, pude presenciar su labor benéfica en esos barrios paupérrimos. Por eso el pueblo lo aclama y no vacilará en escogerlo para cualquier posición que busque en el electorado nacional, pues todo lo entrega a cambio sólo del bien común. Su clínica está ubicada en uno de los sectores mas desposeídos de Santiago y sus pacientes son residentes en esas cañadas mal olientes y este hijo de Hipócrates les presta atención médica gratuita y les regala medicinas. El presidente Fernández puede haber jugado al suicidio provincial con esta alianza funesta, olvidando que el reformismo no tiene un 5% en el electorado y difícilmente logre integrar a la dirigencia morada a la campaña de José Enrique Sued.
El pueblo de Santiago tiene la última palabra y podría revertir lo que para él y su grupo fue una victoria en una humillante derrota y los Serrulle pueden seguir durmiendo tranquilos, pues aunque una alianzas ignominiosa les derrote, ellos continuaran siendo iconos de la sociedad que reconoce de sus filantropías.
Escrito por: Alejandro Almanzar [alex15958@MSN.com]
Foto: gilbertoserulle.blogspot.com/HecoHispano
Como clara señal, de que la decencia, el decoro y el pudor no caben en estas organizaciones y que por el contrario, allí prevalece lo anti valor, la dedocracia, aunque la misma los conduzca al fracaso total. Cuando vimos que este reputado medico decidió optar por la sindicatura, nos llenó de satisfacción, al pensar que por primera vez en las últimas décadas, Santiago tendría un verdadero alcalde preocupado por la municipalidad. Pensamos que por fin, llegaría el orden, la honradez y decencia a administrar el Ayuntamiento y sus recursos, pero en el grupo del presidente Fernández hay algunos, que no quieren ver a la familia Serrulle ni en sopa y a lo mejor tengan muchas razones, pues mansos y cimarrones no pueden mezclarse.
Esta familia ha dado muestra de servir y no servirse de los cargos, lo que puede chocar con los intereses de esos sectores. Los santiagueros conocen muy bien de su entrega a las mejores causas y la forma desinteresada conque trabajan en favor de los pobres, sin demagogia ni politiquería.
A Julián Serrulle, lo recordamos defendiendo obreros de Zonas Francas, evitando sean engañados por patrones inescrupulosos. Del doctor, Gilberto Serrulle, podemos atestiguar mucho mas, pues en mi labor de reportero en esta ciudad, pude presenciar su labor benéfica en esos barrios paupérrimos. Por eso el pueblo lo aclama y no vacilará en escogerlo para cualquier posición que busque en el electorado nacional, pues todo lo entrega a cambio sólo del bien común. Su clínica está ubicada en uno de los sectores mas desposeídos de Santiago y sus pacientes son residentes en esas cañadas mal olientes y este hijo de Hipócrates les presta atención médica gratuita y les regala medicinas. El presidente Fernández puede haber jugado al suicidio provincial con esta alianza funesta, olvidando que el reformismo no tiene un 5% en el electorado y difícilmente logre integrar a la dirigencia morada a la campaña de José Enrique Sued.
El pueblo de Santiago tiene la última palabra y podría revertir lo que para él y su grupo fue una victoria en una humillante derrota y los Serrulle pueden seguir durmiendo tranquilos, pues aunque una alianzas ignominiosa les derrote, ellos continuaran siendo iconos de la sociedad que reconoce de sus filantropías.
Escrito por: Alejandro Almanzar [alex15958@MSN.com]
Foto: gilbertoserulle.blogspot.com/HecoHispano
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